3 de mayo de 2017

Orientación lectora a las familias

¡Hola a todos/as!

Hoy os dejo un post contándoos lo que he explicado en la charla que di a las familias, en el centro donde estoy de prácticas.

Es una charla centrada en orientar a las familias acerca de libros infantiles que hay actualmente en las librerías (alguno está descatalogado) y que pueden atraer a los peques. Además, ofrezco también un decálogo para saber qué hacer y qué no hacer para despertar en los niños el amor por la lectura.

Por último, os dejaré una sorpresa, una actividad que he hecho con mis niños de cinco años para animarles a leer y motivarles, haciéndoles protagonistas de una misión importantísima que les encargan diversos personajes de cuento.

Espero que os guste y que, para aquellas familias que no habéis podido asistir, os sirva para aprender cosas nuevas acerca de la literatura infantil.


Para empezar, cogí un banco para poner libros infantiles que sirven desde los 2 años, y en la mesa de atrás coloqué aquellos libros que son para, al menos, más de tres años de edad.

Puse libros variados, de distintos formatos, para que las familias pudieran observar las diferencias y en qué se distinguen unos de otros.


Estos son los distintos formatos que hay:

Libros-juego: Los cuales divido en dos: 
1. Libros-juego puros: Te van indicando qué hacer y al pasar la hoja suceden cosas "mágicas", pues aparecen nuevas formas, colores, se mezclan las figuras, desaparecen cosas, etc. Son muy buenos para los niños pues les permite interactuar con el libro y divertirse leyendo a la par que juegan. Ejemplo: "Un libro" de Herve Tullet
2. Libros-juego: Son libros donde te mandan cosas como centrar la atención en las ilustraciones, encontrar personajes concretos, buscar a los intrusos, fijarte en qué lleva algún personaje, etc. Son libros para que los peques se concentren y descubran cosas, aumenten el nivel de atención y no se limiten a solo leer el libro.   Ejemplo: "Maravillosos vecinos" de Hélène Lasserre.

Libros interactivos: Son libros que tienen algo especial que permite al alumnado, como bien dice, interactuar con ellos. En este formato entran los libros con pop-up, con solapas, con texturas, con sonidos, etc.
Para quien no lo sepa, este es un ejemplo de pop-up (La figura en 3D que sale del libro):

Álbumes ilustrados: Son libros con un buen texto pero que destacan, sobre todo, por la calidad de las ilustraciones (los dibujos). Son ilustraciones con muchos detalles, con técnicas variadas y distintos tamaños. Es el tipo de libro que más he usado en estas últimas prácticas, pues hay un montón de álbumes ilustrados actualmente en las librerías, y cada vez más.  Ejemplo: "¿De qué color es un beso?" de Rocío Bonilla

Libros de conocimiento: Son libros que tratan un tema específico con una gran profundidad, como por ejemplo los dinosaurios, el espacio, las abejas, el cuerpo humano, los idiomas, etc. De esta forma consiguen mucha información y descubren un montón de cosas nuevas. Yo recomiendo comprar aquellos libros de conocimiento que traten temas que más interesen al peque, como es el ejemplo de los dinosaurios en mi aula (les apasiona). Ejemplo: "Abejas" de Piotr Socha

Libros de poesía: Son libros que están escritos en verso y tienen rimas bastante sonoras. Son libros muy útiles para esta edad, dado que los poemas son breves, pueden leerlos ellos solos con mayor facilidad y son más fáciles de aprender. Además, esa sonoridad que hay al leer en voz alta les encanta y les hace mucha gracia. Ejemplo: "Abezoo" de Carlos Reviejo

Cuentos: Son libros con historias breves que tratan cualquier tipo de temática, se caracterizan por tener bastante texto y pocas ilustraciones. Son muy comunes los libros "365 cuentos para antes de irse a dormir" cuentos para leer a los peques antes de dormir. Ejemplo: "Leyendas del bosque" de Susaeta ediciones

Cuentos clásicos: Son libros con las historias tradicionales como Caperucita Roja, los tres cerditos, Pinocho o las conocidas princesas Disney. He de decir, que en este apartado yo incluiría los libros de Teo, debido a que son muy conocidos y a causa de su antigüedad ya podrían considerarse clásicos.
Ejemplo:

Libros de conceptos: Son libros cuya imagen y texto coincide, es decir, si el texto es "Sol, Luna y Sol" las ilustraciones son un Sol, una Luna y un Sol. Son libros muy útiles para bebés, para los niños que están empezando a leer y para niños que están aprendiendo español. Ejemplo: "Delante de mi casa" de Marianne Dubuc

Libros de imágenes: Son libros parecidos a los álbumes ilustrados pero tienen una peculiaridad, no tienen texto. Son libros muy buenos para desarrollar la creatividad y la imaginación, pues los niños y los no tan niños pueden inventar el texto a su antojo. Ejemplo: "La ola" de Suzy Lee

Y estos son los distintos formatos que hay. Como podéis comprobar, hay una gran cantidad de libros muy variados para que cada niño desarrolle sus gustos y vaya experimentando a ver cuáles le gustan más.


Y, como os prometía, aquí tenéis la actividad que he hecho con mis niños de cinco años: 

¡Pobre Elmer! 
Primero les hice un libro con una historia inventada, basada en los personajes de los distintos libros infantiles que les he ido leyendo. 
La historia era que Elmer, el elefante de colores más conocido por los niños, estaba perdiendo sus colores y no sabía qué hacer, así que decidió pedir ayuda a la brujita Litera Tura, la cual decidió llamar con la ayuda de su amigo Bruno al monstruo de colores para pedirle opinión. Este explicó que tenía la terrible enfermedad blanca y que debían ir al colegio donde están los peques de prácticas para encontrarme a mí y pedirme ayuda. Así que se ponen manos a la obra y la brujita les pregunta si quieren cumplir esta misión de recuperar los colores de Elmer. ¿Cómo? escuchando las historias de los libros que les iba leyendo y pegando las portadas de los libros que les leía yo (y algunas familias) en el mural de Elmer que puse en el pasillo. 
¡Se quedaron asombrados al ver que Litera les nombraba! y, durante semanas, fueron pegando las portadas hasta que mágicamente... ¡Recuperó tooodoooos sus colores! y quedó chulísimo.
Ellos, que son tan inocentes y dulces, creyeron que la magia de verdad existe y que logró recuperarlos gracias a ellos. Si hubierais visto sus caras de alegría y de sorpresa... no se me olvidarán en la vida, fue magia de verdad.

Aquí os dejo algunas fotos de la actividad:




Y aquí os dejo el cambio de Elmer en una de las primeras sesiones y ya recuperado del todo:















Y de cerca...

































¡Espero que os haya gustado!



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