Hoy os dejo la reseña de un libro fantástico y muy divertido. ¿Queréis conocerlo?
Título: La vocecita
Autor: Michaël Escoffier
Año: 2013
Es un álbum ilustrado muy divertido, de la editorial kókinos (la misma que la de ¡Voy a comedte!). Trata de un camaleón llamado Perico, al cual le entran ganas de hacer caca y tiene un problema... ¡Se ha quedado sin papel! Por eso decide limpiarse con un calzón viejo y roto que encuentra, es entonces cuando Perico oye una vocecita ¿Quién será? ¿De dónde viene? ¿Qué le dice? ¡Habrá que averiguarlo!
Es un libro muy divertido porque trata el tema de la caca (que les encanta) desde el humor, con un personaje de nombre peculiar que aprende el valor de cuidar y respetar los objetos ajenos.
El tema de la conciencia lo introduciría para los niños de cinco años, incluso puede que a los de cuatro. Para los peques de tres años puede resultarles algo más complicado, pero eso no quita que el tema de la caca les saque una gran sonrisa o carcajada.
Con este libro podemos trabajar el cuidado de la naturaleza, el respeto por los objetos ajenos, la figura del camaleón, la conciencia, el valor de pedir perdón...
Este libro cuesta 12.50€ y lo encontraréis en las distintas librerías de Oviedo, nombradas en las reseñas anteriores de libros.
He de decir que lo había encargado a la librería del Búho lector y me llegó ayer. Tenía un fuerte olor a libro nuevo, y con lo que a mí me encanta ese olor no podía dejar escapar la oportunidad de mostrarlo a los peques, así que lo llevé hoy al cole y se lo conté a los niños.
Lo olieron mis niños de cinco años y algunos repitieron varias veces. Me encanta acercarles a la literatura infantil y despertar su curiosidad.
Se lo leí a los tres cursos de educación infantil pero con los grupos más mayores (4-5) les hice dos preguntas muy importantes antes de comenzar. Mostrándoles la portada les pregunté: ¿De qué animal será esa cola? ¿Por qué tendrá ese animal un calzón en su cola?
Viene muy bien para generar expectación y motivarles, además de favorecer su expresión oral y trabajar el hablar en público y valorar su opinión personal, haciendo que se cuestionen todo y escuchen con más ganas.
Respecto a la primera pregunta debatían si era una lagartija o un camaleón, incluso alguno dijo que era un sapo.
Y la segunda pregunta dio lugar a respuestas curiosas, por ejemplo que tenía el calzón porque estaba camuflado en una casa y se pensaron que era una percha. Otra respuesta fue que se le había quedado enganchado (Variación de otro niño: Se le había quedado pegado a la cola).
En la clase de cinco años hubo una niña que aplaudió y dijo que le encantó, además que les hizo mucha gracia la parte donde hacía caca y se había quedado sin papel.
En cuatro años tuve que leerlo dos veces (y hubo alguno que pedía otra vez más) y les gustó el mismo trozo que a los niños de cinco años. Hablamos sobre lo que es la conciencia y si se puede coger o no las cosas ajenas. Hay algunos que ya se están acostumbrando a la rutina de hablar después de contar la historia y ya me dicen lo que más les ha gustado antes de preguntarles yo.
En tres años no converso porque están acostumbrándose a que tienen que estar atentos y escuchar la historia (les cuesta un poquito), y centrar la atención para conversar ya es pedir demasiado (al menos por ahora), tendré que experimentar un día a ver qué sale. De todas formas, hay algunos peques que son una delicia y se quedan absortos escuchando.
Lo que más me gusta de los más chiquitines es ver sus gestos de sorpresa con las ilustraciones, como les gusta decirme lo que ven. Y que alguno me pida "cueto" en el recreo ya es una satisfacción para mí.
Espero que os animéis a comprarlo o a buscarlo por la biblioteca para leerlo en casa con vuestros peques porque no os vais a arrepentir y vais a disfrutar mucho con el camaleón Perico. Además, el final no te lo esperas y os puede sacar una gran sonrisa.
...Y colorín colorado ... este cuento se ha acabado.
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